Más protección para los trabajadores mayores
Hace algunos años era normal que los trabajadores de más edad tuvieran menos probabilidades de estar desempleados que los más jóvenes. Pero ahora el desempleo afecta sobre todo a este grupo. Increíblemente el Presidente de la Confederación Parmelin decidió no seguir con la mesa redonda para trabajadores mayores. Un craso error que hay que corregir.
En octubre de 2021, el 5,5% de personas en búsqueda de trabajo comprendían a edades entre los 55 y los 64 años, un porcentaje bastante más alto que entre los más jóvenes. Pero los desempleados de más edad se ven más afectados cuando pierden su trabajo. Se demoran más y tienen menos posibilidades de encontrar un nuevo empleo. Esto explica las cifras anteriores. Este progresivo deterioro es inaceptable y exige nuevas medidas.
Una mesa redonda exitosa
El rumbo a tomar para mejorar la situación de los trabajadores mayores se ha debatido desde 2015 en una mesa redonda con la presencia de las asociaciones de empresarios y trabajadores, así como de la Confederación y los cantones. Algunas mejoras ya se han aplicado parcialmente: por ejemplo, los desempleados mayores de 58 años pueden permanecer en su fondo de pensiones y tienen derecho a una prestación transitoria bajo ciertas condiciones. Además, los trabajadores desde 40 años tienen derecho a una evaluación gratuita por parte de un orientador profesional con el fin de prepararse para la segunda mitad de su vida laboral. Pero es insuficiente. Por lo cual no se entiende la decisión de Parmelin de terminar con la mesa redonda.
Nuevos pasos a seguir
Nuevas medidas podrían mejorar la situación, eso está claro. Entre ellas, una mejor protección contra el despido para los trabajadores de más edad que llevan mucho tiempo trabajando en la misma empresa. Pero también es necesaria una mayor protección contra la discriminación a la hora de buscar trabajo, para de este modo aumentar las posibilidades de los trabajadores mayores. Además, hay que optimizar la oferta de formación y capacitación para los trabajadores desde 40 años. Esto se hace patente en sectores que están cambiando rápidamente debido a la digitalización. No puede ser que las nuevas máquinas y programas deban ir de la mano de la contratación de nuevo personal. Todos los trabajadores deberían ser incluidos en el proceso. Para que funcione, se necesita una mayor financiación de la formación, así como más tiempo para que los trabajadores la completen. Por estas demandas Travail.Suisse trabajará en Berna, ya sea en una nueva mesa redonda o directamente en el parlamento.
