¿Cuánto trabajo es saludable?
Cada vez más personas se quejan del estrés en el trabajo, de la presión de estar constantemente disponibles o incluso de sufrir un burn out. ¿Quizás el mundo laboral está tomando una dirección equivocada? Discutimos sobre esto con Brigitta Danuser, Profesora emérita de Medicina Laboral.
Sra. Danuser, ¿el trabajo nos enferma?
Efectivamente, incluso un tercio de todos los trabajadores encuestados dicen que el trabajo los enferma. El desgaste físico en el trabajo ha tendido a disminuir en Suiza. Pero en lo que respecta al aspecto psicológico, tenemos un problema. Tiene que ver con el hecho de que el trabajo se ha vuelto más intensivo. Al mismo tiempo tenemos menos libertad.
Además, la relevancia del trabajo en nuestra sociedad ha cambiado: Hoy en día tendemos a definirnos a través de nuestro trabajo, que da sentido a nuestra vida. Ya no sólo jugamos un rol en nuestro trabajo, sino que «somos» nuestro trabajo.
¿Trabajamos más que antes?
En ciertos sectores sí, pero no en su totalidad. Es mucho más la forma en que trabajamos: Tenemos que estar disponibles todo el tiempo, reaccionando siempre instantáneamente. El trabajo también se ha vuelto más exigente en términos de contenido. Se ha ido desplazando cada vez más hacia el servicio. Tenemos que estar mucho más involucrados como persona, comunicarnos constantemente. Esto hace que nuestro trabajo sea más emocional y por lo tanto más desafiante.
Al mismo tiempo, estamos sujetos a un mayor control, lo que crea una presión adicional: en el mundo laboral digital, mi jefe siempre sabe lo que estoy haciendo y dónde estoy en cada momento.
Ahora una iniciativa parlamentaria quiere que trabajemos de forma aún más flexible: Hasta 67 horas a la semana, incluso durante la noche, los fines de semana o después de menos de 8 horas de descanso...
Otro tema importante en relación con la iniciativa: en el régimen de Graber, las mujeres y los hombres con trabajo familiar no tienen lugar. No cumplen las condiciones requeridas y están excluidos de esos trabajos. Lo mismo se aplica a los enfermos crónicos. ¡Y los solteros y los jóvenes se llevan el peso de todo esto!
«En la medicina ocupacional, se sabe que el tiempo de trabajo y el estrés tienen una relación directa: Cuanto más sean las horas de trabajo, mayor será el estrés.»
Brigitta Danuser
A los empresarios les gusta decir que la indicación propuesta por Graber en la ley laboral también beneficiaría a los empleados. Que ellos mismos desearían trabajar así.
¿Realmente quieren eso? El problema aquí es la flexibilidad unilateral: Graber sólo se lo exige a los empleados. ¡Las pausas y los períodos de descanso, por ejemplo, no están descritos en la iniciativa!
Naturalmente, las jornadas laborales más flexibles también ofrecen ventajas para los empleados, especialmente cuando se trata del cuidado familiar. No son perniciosas en sí mismas siempre y cuando los trabajadores participen en su planificación.
